top of page
Buscar

El cartero de Neruda

  • Foto del escritor: Gonzalo Guillermo Miguel Sandoval
    Gonzalo Guillermo Miguel Sandoval
  • 31 may
  • 6 Min. de lectura

Pablo Neruda, poeta, chileno de nacimiento, universal por su obra literaria; Matilde Urrutia, musa y compañera de Pablo Neruda: Mario Ruoppolo, cartero en un ambiente de humildes pescadores; Beatrice Russo, huérfana y sobrina de Doña Rosa, la dueña del único hostal en la isla (ficción).


A principios de la década de 1950, el poeta chileno Pablo Neruda (a la sazón, senador de la república), arriba a la pequeña y bella isla italiana de Salina, expatriado de Chile, su patria adorada, luego de que, por diferencias políticas con el presidente en turno y, por sus ideas comunistas, fuera primero, perseguido; después obligado a la clandestinidad y, al final, al exilio.

 

No llega sólo, le acompaña Matilde, su compañera inseparable, quien ha decidido compartir la suerte del amado.

 

Desde que se anuncia su llegada a la apartada isla, causa gran revuelo, pues para entonces su oficio de poeta y su correspondiente obra, son ampliamente conocidas en el mundo entero.

 

Unos se refieren a él, como el “poeta del pueblo”; otros, como el “poeta del amor” o, el “poeta de las mujeres”, por el gran arraigo que tiene su escritura entre el sexo femenino.

 

En Salina, la principal actividad de sustento es la pesca, y la mayoría de sus habitantes son analfabetas.

 

Mario Ruoppolo es hijo de un pescador, pero, a diferencia de su padre, la actividad le produce mareos y constantes malestares respiratorios a causa de la humedad.

 

Sabedor de la poca inclinación de Mario por las actividades marinas, su progenitor le exige que se busque un empleo: “el que sea”.

 

Así, Mario se convierte en cartero.

 

Su función: entregar la correspondencia que recibe el único destinatario en Salina: Pablo Neruda.

 

Mario está fascinado, pues la personalidad del “poeta de las mujeres” le atrae como un imán.

 

Comienza a leer un libro de la autoría de Neruda y un día le pide que se lo dedique con su firma.

 

Poco a poco, gana confianza con Don Pablo y le inquiere de manera inocente, acerca de sus primeras lecturas:

 

“… ¿Qué es una metáfora?”

 

“… Es cuando hablas de una cosa y la comparas con otra…”

 

“… ¿Por qué dice usted en un poema que el olor de las peluquerías le hace llorar a gritos?”

 

“… Si la explicas, la poesía se vuelve banal. Es mejor la experiencia directa de los sentimientos, lo que puede revelar la poesía…”

 

“… ¿Cómo se hace uno poeta?”

 

“…Intenta caminar, lentamente, por la orilla, hasta la bahía, mirando a tu alrededor…”

 

“… ¿Y se me ocurrirán las metáforas?

 

“… Seguramente…”

 

Mario se abstrae cada vez en sus pensamientos, mira a su interior, y fuera de su trabajo de cartero, vive ensimismado.

 

Entonces aparece Beatrice Russo, que ha llegado a vivir a la isla, con su tía Doña Rosa, la dueña del hostal y taberna del pueblo.

 

Mario, verá encarnar en la realidad, las palabras, la poesía, los sentimientos, la belleza, el amor.

 

Está rotundamente enamorado y decidido a hacer cualquier cosa, para alcanzar el motivo de sus desvelos: Beatrice.

 

Sella su compromiso de amistad con el poeta y con esa confianza, comienza a usar sus versos, para conquistar a Beatrice.

 

El poeta, al enterarse, le dice que no es adecuado que use los versos que él dedicó a Matilde, para conquistar a Beatrice. El cartero le responde:

 

Maestro, la poesía no es de quien la escribe, si no de quien la necesita”.  

 

La poesía, de manera impensada, se encargó de unir a estos dos seres disímbolos, compartiendo algo en común: su sensibilidad.

 

Ahora, la política les tiene reservada una sorpresa.

 

Al maestro, le avisan que su exilio ha terminado y puede regresar a Chile.

 

A Mario, su alma engrandecida por la poesía, le hace unirse a sus compañeros pescadores, para exigir reivindicaciones largamente esperadas para su actividad.

 

Película italiana (basada en la novela Ardiente Paciencia, de Antonio Skármeta) estrenada en 1994, dirigida por Michael Radford, y con las actuaciones estelares de Philippe Noiret, Masimmo Troisi, María Grazia Cucinotta, Linda Moretti, Renato Scarpa y Anna Bonaiuto.

 

En el año 1995, fue nominada a los Premios Óscar, en cinco categorías diferentes: Mejor película; Mejor director; Mejor actor; Mejor guion adaptado, y Mejor banda sonora. Ganó dicho premio en esta última categoría.

 


Seguro de Vida (realidad)

 

El contrato de seguro de vida es un contrato de adhesión y de buena fe.

 

Las aseguradoras, en términos generales, por virtud de este tipo de contrato se obligan a cubrir una indemnización a los beneficiarios señalados en la póliza respectiva, cuando ocurra la eventualidad del fallecimiento del asegurado.

 

Como todo contrato tiene sus propias particularidades técnicas y, desde luego, como reza el anuncio: “aplican restricciones”.

 

Este contrato se inscribe en el apartado de Contrato de Seguro sobre las Personas, en el Título III de la Ley Sobre el Contrato de Seguro (LSCS).

 

No obstante, existen disposiciones que afectan a dicho Contrato de Seguro sobre las Personas, en otros apartados de la propia LSCS.

 

Así tenemos, por ejemplo, el Título I, Disposiciones Generales, con sus distintos Capítulos, donde se tratan, entre otros temas:

 

Capítulo I / Definición y Celebración del Contrato / Artículos, del No. 1, al No. 18.

 

Capítulo II / La Póliza / Artículos, de No. 19, al No. 30.

 

Capítulo III / La Prima / Artículos, del No. 31, al No. 44.

 

Capítulo IV / El riesgo y la realización del siniestro / Artículos, del No. 45, al No. 80.

 

Capítulo V / Prescripción / Artículos, del No. 81, al No. 84.

 

Finalmente, tenemos el Título V, Disposiciones Finales, Artículos, del No. 204, al No. 207.

 

De este último Título V, trataremos hoy, el artículo 204, que a la letra dice:

 

Artículo 204.- Todas las disposiciones de la presente ley tendrán el carácter de imperativas, a no ser que admitan expresamente el pacto en contrario.

 

La redacción de este precepto resulta de altísima importancia. De su lectura se concluye:

 

A). - Todas las disposiciones contenidas en la Ley Sobre el Contrato de Seguro (LSCS) son de interpretación estricta. Es decir, atendiendo a su redacción, sin distinguir, donde la propia ley no distingue, y

 

B). - Se admite “pacto en contrario”, donde la ley, de manera expresa, así lo permita.

 

Para ejemplificar, tomemos el Artículo 34 de la LSCS:

 

Artículo 34.- Salvo pacto en contrario, la prima vencerá en el momento de la celebración del contrato, por lo que se refiere al primer período del seguro; entendiéndose por período del seguro el lapso para el cual resulte calculada la unidad de la prima. En caso de duda, se entenderá que el período del seguro es de un año.

 

En una Póliza de Seguro de Vida, considerando que el primer período del seguro, es de un año, la prima (cantidad a pagar) vencerá (será exigible su pago), en el momento (fecha) de celebración del contrato.

 

Conclusión: hay que liquidar la Anualidad completa desde la celebración del contrato.

 

Salvo pacto en contrario entre la Aseguradora y el Contratante.

 

Caso específico: cuando se pactan, de manera expresa, pagos fraccionados de la prima (semestrales, trimestrales, mensuales).

 

Parece algo complicado, pero si lo hablas antes con tu agente de seguros, él aclarará todas tus dudas.

Acto de amor

 

En anteriores oportunidades hemos mencionado que la contratación de un seguro de vida, equivale a un acto de amor.

 

Primero: para contigo mismo, al reconocerte como ser humano sujeto a todos los riesgos que implica vivir la simple “vida diaria” y que la misma se vea perturbada por alguna eventualidad funesta.

 

Dicen, y dicen bien: “los accidentes no avisan, suceden”.

 

Segundo: para tus seres queridos y, en general, para las personas que dependen económicamente de ti, y a las cuales, de manera normal, tú vienes apoyando a cristalizar sus planes y proyectos. Para que, en tu ausencia, esos planes y proyectos no se trunquen.

Corolario

 

            Ojalá tengas oportunidad de ver la película y te guste, como a mí.

 

            Asimismo, espero que las notas de arriba te sean de utilidad.

 

            Si es así, coméntame.

 

            En casi contrario (se vale), también… coméntame.

 

Finalmente recuerda:

“¡Si eres de los que piensan: no puedo pagar un seguro de vida (o un Seguro de Protección y Ahorro); probablemente lo necesites más que aquellos que si pueden pagarlo!”

 

Apoyemos, reconozcamos y respetemos a nuestros médicos, enfermeras, laboratoristas, camilleros, operadores de ambulancias, personal de intendencia y a todo el gremio de la salud. Ellos trabajan en nuestro beneficio y contra el COVID-19.

29 / mayo / 2025

Gonzalo Guillermo Miguel Sandoval

Agente Profesional de Seguros

Consultor Fiscal

9991-929563

 
 
 

Comments


© 2020 Gutiérrez y Arredondo S.C.P.

Página oficial creada para Lic. Gonzalo Guillermo Miguel Sandoval.

Aviso de Privacidad.

  • LinkedIn - círculo blanco
  • whatsapp (1)
  • Facebook - círculo blanco
bottom of page